Los derechos humanos son aquellos inherentes a las personas, es decir, que somos titulares de estos por nuestra condición de seres humanos.
DERECHOS HUMANOS: ORIGEN Y EVOLUCIÓN
El reconocimiento de los derechos inherentes a la personalidad humana tuvo un largo proceso evolutivo hasta lograr su reconocimiento en ciertos pueblos, primero, para después convertirse en valores jurídicos y tener vigencia, como derecho positivo internacional a través de diversos documentos conocidos como “declaraciones y pactos”.
Los primeros tipos históricos de organizaciones políticas: Oriente, Egipto, Babilonia, Asiria, India y Persia se sustentaron sobre la base de gobiernos teocráticos que ejercían el dominio sobre la comunidad y cuya autoridad estaba investida de plenos poderes, pues ellos eran electos por los dioses, hecho por el cual, toda persona carecía de derechos frente a su autoridad. Eran verdaderos regímenes esclavistas, cuyo sustento se encontraba en la fuerza usada en nombre del mandato divino concentrada en el gobernante, por ello, cualquier intento de derrocar al gobernante era considerado un acto directo contra los dioses.
Sin embargo, había verdaderas excepciones en cuanto al tratamiento de algunas cuestiones relacionadas con los derechos de la persona humana; por ejemplo: el Código de Hammurabi, que data de aquellas épocas, ya consagraba derechos comunes para todos los hombres: a la vida, a la familia, a la propiedad, al honor y a la buena fama; asimismo, establecía que el derecho está por encima del arbitrio o voluntad del rey.
Sin embargo, lo cierto es que estas expresiones carecían del sustento real, porque la esclavitud como forma de organización social y la arbitrariedad como conducta habitual de los gobernantes eran los dos aspectos más resaltantes de todas las organizaciones sociales de la época. Los hebreos, sin embargo, podemos afirmar que eran la excepción, pues su organización teocrática era diferente en cuanto a su ejercicio y relacionamiento entre gobernantes y gobernados, efectivamente, el poder de los reyes y jueces encontraban en la divinidad límites determinados y la relación entre los gobernantes y la población se basa en la idea de obligaciones recíprocas contraídas por ellos bajo la forma de un “Pacto ante Jehová”. Por ello, si bien el pueblo se sometía a la autoridad, lo hacía en virtud a un contrato divino y los monarcas por su parte no pretendían personificar a los dioses y sus atribuciones estaban limitadas por el mismo contrato.
Es en Grecia, en donde encontramos verdaderas manifestaciones sobre la libertad, la igualdad y la responsabilidad de los actos del hombre. Su organización social era diferente, si bien también tenían esclavos, era la ciudad de Atenas, esbozo de un verdadero estado democrático, que defendía valores tales como: libertad, igualdad, democracia y responsabilidad. Democrático porque el Rey era asistido por un consejo de ancianos; no todo era por su decisión propia, sino aprobada por ese consejo que eran representantes del pueblo. Era un ejemplo de democracia directa, el pueblo se reunía para participar en la toma de decisiones importantes. Es importante resaltar, que la elaboración del concepto de derechos humanos fue en gran parte producto de la filosofía, y Atenas fue cuna de grandes filósofos como Aristóteles y Sócrates.
Más adelante, los derechos humanos fueron reconocidos por casi todos los pueblos, y esto ocurrió de una forma progresiva, consagrándose algunos antes que otros; es por ello que se clasifican en derechos de primera, segunda y tercera generación, conforme a su orden de aparición, todo ello lo estudiaremos en las próximas lecciones.
Para concluir, es importante resaltar que los derechos humanos son, hoy día, el principal tema de tratamiento a nivel mundial, y se cuenta con una variada legislación instrumentada en documentos internacionales conocidos como tratados, pactos y declaraciones, (que en algunos estados, conforme a su ordenamiento jurídico, ocupan un rango superior al de las demás leyes y códigos dictados por su gobierno); para su elaboración, se han creado organismos internacionales algunos con carácter mundial como la Organización de las Naciones Unidas (ONU) y otros de carácter regional como la Organización de los Estados Americanos (OEA). Además ya se cuentan con Tribunales internacionales cuyo objetivo es velar por el cumplimiento de los tratados y el reconocimiento y respeto a los derechos humanos.
(Fuente ABC Color)
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